Deshidratación en atletas: síntomas, riesgos y cómo prevenirla

Deshidratación en atletas: síntomas, riesgos y cómo prevenirla

La deshidratación es una de las principales causas de disminución del rendimiento deportivo y puede tener consecuencias graves para la salud de los atletas. Durante el ejercicio, el cuerpo pierde líquidos y electrolitos a través del sudor, lo que puede afectar la resistencia, la fuerza y la capacidad cognitiva. Conocer los síntomas, riesgos y estrategias de prevención es fundamental para mantener un estado óptimo de hidratación y garantizar un mejor desempeño en el deporte.

Lazarraga Collagen Complex – Ácido Hialurónico, Coenzima Q10, Vitaminas Y Minerales – 60 Cápsulas Lazarraga Collagen Complex – Ácido hialurónico, coenzima Q10, vitaminas y minerales – 60 cápsulas

EXCELENTE FÓRMULA COMPLEX a base de Ácido Hialurónico, Coenzima Q10, Vitamina A, C, D, B12, Zinc y Magnesio. Sus ingredientes contribuyen a la formación de colágeno para el funcionamiento normal de la piel, cabello, uñas, huesos, cartílagos y...

19.90€ Ver producto

Síntomas de la deshidratación en atletas

El cuerpo humano tiene mecanismos para regular el equilibrio de líquidos y electrolitos, pero cuando la pérdida de agua supera la ingesta, comienzan a aparecer signos de deshidratación. Algunos de los síntomas más comunes en los atletas incluyen:

  • Sequedad en la boca y garganta: La disminución de la producción de saliva genera una sensación de sequedad e incomodidad.
  • Mareos y fatiga: La reducción del volumen sanguíneo afecta el transporte de oxígeno y nutrientes a los músculos y al cerebro, lo que puede provocar cansancio extremo y desorientación.
  • Disminución del rendimiento físico: La deshidratación afecta la resistencia, la velocidad y la fuerza, reduciendo la capacidad de mantener la intensidad del ejercicio.
  • Aumento de la frecuencia cardíaca: La menor disponibilidad de líquidos obliga al corazón a trabajar más intensamente para bombear la sangre.
  • Calambres musculares: La pérdida de sodio, potasio y magnesio puede desencadenar contracciones musculares involuntarias y dolorosas.
  • Orina de color oscuro: La reducción en la ingesta de líquidos hace que la orina se vuelva más concentrada, lo que indica un déficit de hidratación.
  • Dolor de cabeza y confusión mental: El cerebro necesita agua para su funcionamiento óptimo; cuando se produce una deshidratación, pueden aparecer problemas de concentración y alteraciones en la coordinación.

Deshidratación atletas

Riesgos de la deshidratación en el deporte

Los efectos de la deshidratación van más allá de una simple reducción en el rendimiento. En casos graves, pueden presentarse consecuencias severas que ponen en riesgo la salud del atleta:

  • Golpe de calor: La falta de líquidos impide una correcta regulación de la temperatura corporal, lo que puede llevar a un colapso térmico y poner en peligro la vida.
  • Reducción del volumen sanguíneo: Un menor volumen plasmático afecta la circulación y disminuye la cantidad de oxígeno y nutrientes que llegan a los músculos y órganos vitales.
  • Mayor riesgo de lesiones: La deshidratación altera la elasticidad de los músculos, tendones y ligamentos, aumentando el riesgo de desgarros y esguinces.
  • Problemas renales: La falta de agua dificulta la eliminación de toxinas a través de la orina, lo que puede generar una sobrecarga en los riñones y favorecer la aparición de cálculos renales.
  • Hiponatremia: En algunos casos, los atletas pueden beber demasiada agua sin reponer electrolitos, lo que diluye los niveles de sodio en sangre y provoca una condición peligrosa conocida como hiponatremia.

Cómo prevenir la deshidratación en atletas

Prevenir la deshidratación es clave para mantener el rendimiento deportivo y evitar complicaciones de salud. A continuación, se presentan algunas estrategias efectivas:

Mantener una hidratación adecuada antes del ejercicio

Es recomendable comenzar el entrenamiento o la competencia con un buen nivel de hidratación. Algunas sugerencias incluyen:

  • Beber entre 400-600 ml de agua unas dos horas antes del ejercicio para permitir que el cuerpo absorba y distribuya los líquidos adecuadamente.
  • Consumir frutas y verduras con alto contenido de agua, como sandía, pepino y naranjas, para mejorar la hidratación celular.
  • Evitar bebidas con cafeína o alcohol, ya que pueden aumentar la producción de orina y favorecer la deshidratación.

Hidratarse durante el ejercicio

Durante la actividad física, es fundamental reponer los líquidos perdidos a través del sudor para evitar la fatiga y el sobrecalentamiento:

  • Beber entre 150 y 250 ml de agua cada 15-20 minutos, dependiendo de la intensidad del ejercicio y las condiciones ambientales.
  • En deportes de larga duración, optar por bebidas deportivas con electrolitos y carbohidratos para reponer los nutrientes perdidos.
  • Evitar el consumo excesivo de líquidos en poco tiempo, ya que esto puede provocar molestias digestivas y reducir la absorción de agua.

Reponer líquidos después del ejercicio

El proceso de rehidratación no termina al finalizar la actividad física. Para recuperar los líquidos perdidos, es importante:

  • Beber suficiente agua para restaurar el equilibrio hídrico, asegurándose de consumir 1,5 litros de agua por cada kilogramo de peso perdido durante el ejercicio.
  • Incluir alimentos ricos en sodio y potasio, como plátanos, frutos secos y yogur, para ayudar a la recuperación muscular.
  • Controlar el color de la orina para evaluar el estado de hidratación y ajustar la ingesta de líquidos si es necesario.

La deshidratación es un problema común en los atletas y puede afectar de manera significativa el rendimiento deportivo y la salud. Conocer los síntomas y riesgos permite tomar medidas preventivas y garantizar un adecuado estado de hidratación. Implementar estrategias como beber líquidos antes, durante y después del ejercicio, así como reponer los electrolitos perdidos, ayudará a optimizar la resistencia y evitar problemas asociados a la falta de líquidos.

Referencias

5/5 - (246 votos)

Deja un comentario


X