El estrés favorecen la aparición de trastornos digestivos
Las molestias digestivas ocasionales pueden tener muchas causas posibles, desde la dieta hasta el estrés cotidiano. La mayoría de las veces, los síntomas desaparecen por sí solos, pero algunos remedios sencillos que se pueden realizar en la comodidad de su propia casa pueden aliviar las molestias.
Los síntomas más comunes de los trastornos digestivos son dolor abdominal, náuseas, vómitos, hinchazón, estreñimiento, diarrea y pirosis. Una dieta desequilibrada o un estilo de vida poco saludable pueden provocar estos síntomas. La modificación del estilo de vida o la consulta con un especialista es la mejor manera de aliviar los síntomas.
Formas de mejorar la digestión
Hay varias formas de mejorar la digestión. Los más importantes son:
Reducir el estrés
Muchas personas pueden experimentar síntomas específicos de los trastornos digestivos antes de un examen o un acontecimiento importante de la vida. Sin embargo, no es este tipo de estrés el que provoca trastornos digestivos importantes, sino el estrés sostenido. Puede afectar a la conexión entre el cerebro y los intestinos, provocando trastornos digestivos.
Existe un importante vínculo entre la salud física y la mental, y reducir el estrés puede tener un impacto positivo en ambas. Los especialistas recomiendan las siguientes formas de gestionar el estrés:
- apoyarse en los seres queridos
- evitar los conflictos
- ejercicio regular
- un descanso adecuado
En los días ajetreados, la mayoría de la gente tiene la tentación de comer de mala manera o de saltarse ciertas comidas. Estos pueden causar indigestión y malestar digestivo, por lo que es muy importante reservar el tiempo suficiente para comer.
Aumentar el consumo de té de menta
El té de menta es un remedio que está al alcance de todos y se utiliza para aliviar las náuseas y el dolor abdominal. Sin embargo, algunas personas afirman haber experimentado pirosis después de beber té de menta.
La preparación del té a la menta es muy sencilla, ya que requiere hervir una cantidad adecuada de agua y ponerla en infusión con hojas de menta. El té se puede mejorar con limón, miel o azúcar.
Los investigadores han descubierto que el aceite de menta puede aliviar a corto plazo los síntomas del síndrome del intestino irritable, incluido el dolor de estómago. Sin embargo, se necesita más investigación sobre la eficacia de la menta en los problemas digestivos durante períodos más largos.
Hacer ejercicio regularmente
Practicar un deporte de intensidad moderada puede favorecer la digestión. Mantener una posición erguida permite que la gravedad ayude a mover los alimentos a través del sistema digestivo. Hay que saber que incluso un corto paseo puede ayudar a aliviar la hinchazón y la plenitud.
Reducir los niveles de gases digestivos
La aparición de gases en el aparato digestivo se debe a la deglución de aire al ingerir alimentos. Además, el cuerpo puede producir gases durante la digestión de los alimentos. Los gases en los intestinos provocan hinchazón y malestar abdominal.
Aumentar la ingesta de fibra
La fibra contiene una amplia gama de beneficios para la salud, desde la disminución del colesterol hasta la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas. El consumo de fibra también puede ayudar a mejorar la digestión al regular el peristaltismo intestinal.
Según las directrices dietéticas, un adulto debería incluir 30 gramos de fibra en su dieta diaria. Las fuentes ideales de fibra son los cereales integrales, la fruta y la verdura, las legumbres, etc. Además, la persona debe consumir suficientes líquidos para garantizar que la fibra absorba suficiente agua para pasar fácilmente por el sistema digestivo.
Llevar un diario de alimentos
Algunos alimentos y bebidas pueden desencadenar la aparición de trastornos digestivos. Estos factores desencadenantes pueden variar de una persona a otra, y llevar un diario en el que se anoten las comidas, los aperitivos y las bebidas, así como cualquier síntoma digestivo que se produzca como consecuencia de su consumo, ayuda a identificar a los culpables.
Un nutricionista puede proporcionar el asesoramiento adecuado antes de que una persona haga cambios significativos en su dieta. Un diario de alimentos puede ayudar al nutricionista a orientar correctamente al paciente.
Conclusiones
Los problemas digestivos pueden tener muchas causas, algunas inofensivas y otras más graves. Hay casos en los que el tratamiento no es necesario, pero la adopción de algunas medidas sencillas puede ayudar a aliviar las manifestaciones desagradables.
En el caso de las afecciones graves, es necesario un tratamiento, pero algunos remedios también pueden ayudar. Sin embargo, el médico debe ser informado de antemano cuando se produzcan cambios significativos en el estilo de vida. También se debe informar al médico cuando se produzcan síntomas desagradables, ya que puede evaluar correctamente la situación y dar las mejores recomendaciones.